Hola! Soy Adri y por petición popular hoy hablamos sobre un tema sobre el que hay mucha curiosidad. Las diferentes lesiones más frecuentes (según el sexo) en un deporte que está muy en auge: el running. Esta es una de las actividades físicas más practicadas en todo el mundo, pero también una de las que más lesiones genera debido al impacto repetitivo y la sobrecarga muscular. Aunque hombres y mujeres pueden sufrir problemas similares, existen diferencias biomecánicas y hormonales que hacen que cada sexo sea más propenso a ciertos tipos de lesiones. En esta entrada, analizamos las lesiones más comunes en corredores, cómo prevenirlas, diagnosticarlas y recuperarse de ellas.
Lesiones más comunes en corredores: diferencias entre hombres y mujeres.
Lesiones Frecuentes en Mujeres
- Síndrome de la Cintilla Iliotibial
– Se produce por la fricción de la cintilla iliotibial contra el fémur, causando dolor en la parte externa de la rodilla.
– Factores como una mayor inclinación pélvica y debilidad en los glúteos aumentan el riesgo en mujeres.
- Fracturas por Estrés
– Más comunes en mujeres debido a la menor densidad ósea y factores hormonales como la disminución de estrógenos.
– Afectan principalmente la tibia, el metatarso y el fémur.
- Síndrome de Dolor Patelofemoral
– Provoca dolor en la parte frontal de la rodilla por un desequilibrio en la musculatura del cuádriceps.
– La anatomía femenina, con una mayor inclinación del fémur hacia la rodilla, contribuye a su aparición.
Lesiones Frecuentes en Hombres
- Tendinitis de Aquiles
– Más común en hombres debido a una mayor carga sobre el tendón por el peso corporal y patrones de carrera.
– Provoca dolor en la parte posterior del tobillo y puede derivar en rupturas si no se trata.
- Fascitis Plantar
– Inflamación de la fascia plantar, causando dolor en la base del pie.
– Factores como el uso de calzado inadecuado y una técnica de carrera incorrecta aumentan el riesgo.
- Lesiones de Isquiotibiales
– Debido a una mayor masa muscular en los hombres y patrones de carrera más explosivos, los desgarros y contracturas en los isquiotibiales son frecuentes.
¿Y cómo podemos prevenir este tipo de lesiones?
Aquí te dejo algunos consejos que me parecen fundamentales.
– Fortalecimiento Muscular: Incluir ejercicios en nuestro entrenamiento de fuerza para fortalecer glúteos, cuádriceps e isquiotibiales.
– Trabajo de técnica de carrera: Evitar zancadas largas y priorizar aterrizar con el pie debajo del centro de gravedad.
– Uso de calzado adecuado: Elegir zapatillas con la amortiguación y estabilidad necesarias según el tipo de pisada y peso de cada uno.
– Incremento progresivo del volumen de entrenamiento: No aumentar la distancia o la intensidad más del 10% semanalmente.
– Movilidad y estiramientos: Incorporar ejercicios de flexibilidad para prevenir desequilibrios musculares.
Y si por desgracia hemos caído ya en alguna de estas lesiones, aquí te dejo algunos tips como tratamiento general para las mismas.
– Reposo activo: Evitar correr mientras se recupera la lesión, pero mantener movilidad con ejercicios de bajo impacto como ciclismo o natación.
– Fisioterapia: Técnicas con terapia manual con tu fisioterapeuta, ejercicios de fortalecimiento y estiramientos guiados pueden acelerar la recuperación.
– Hidroterapia: El entrenamiento en agua ayuda a mantener la movilidad y fortalecer músculos sin impacto.
– Uso de Ortesis o Vendajes: En algunos casos, el uso de plantillas o vendajes funcionales puede ayudar a reducir el estrés en la zona lesionada.
– Terapias de regeneración: Tratamientos como ondas de choque o plasma rico en plaquetas pueden ser opciones avanzadas en lesiones crónicas. Esto último evidentemente realizado por un fisioterapeuta/osteópata.
En resumen, las lesiones en corredores pueden afectar tanto a hombres como a mujeres, pero comprender las diferencias biomecánicas y hormonales permite prevenirlas y tratarlas de manera más efectiva. Con un enfoque adecuado en fortalecimiento, técnica de carrera y recuperación, es posible reducir el riesgo de lesiones y mejorar el rendimiento sin comprometer la salud. Si experimentas molestias persistentes, acudir a un fisioterapeuta o especialista en medicina deportiva es clave para evitar complicaciones y volver a correr de manera segura.